4.5.05

todas las vidas pueden ser el día de la marmota

hace dos días que me echo vinagre en la tostada
para que los demás tengan la razón de mi mal humor.
echo de menos tu pulgar impidiéndome fruncir el ceño,
y pido que esta vez no me dejen pegar los trocitos para no poder volver a romperme.
y que alguien me cuente el cuento de la reina de las nieves, que creo que no lo supe nunca.
sólo has hecho falta tú para que me convierta en una resentida y se me manifieste la esquizofrenia: creo que debería ir empezando a fumar para cuando sea una vieja delante de la tele.