27.4.04

Uno de los inconvenientes de ser diminuta es que mi sesenta por ciento de líquido soporta, evidentemente una mucho menor disolución de sal que el sesenta por ciento de líquido de una persona de tamaño normal. Lo que significa que me saturo con facilidad, y como las sal debe ser expulsada de mi organismo, pues segrego lágrimas con demasiada frecuencia.

Pero no tengo que pagar en los museos.